13 Oct 2009
Situación desde el campo base: somos positivos.

No sé cómo empezar, no sé cómo explicaros lo que siento, en definitiva no sé qué hacer.
Pero voy a contaros primero lo que ha pasado y luego al final si puedo os contare cómo me siento.

Como teníamos previsto el domingo día 11 salimos del campo base, con ilusión, con ganas de subir al Shisa Pangma y, sobre todo con ganas de disfrutar de la escalada. El día fue muy largo, primero llegamos hacia las 11 de la manana al campo avanzado donde teníamos algo de material, recogimos lo que necesitábamos y continuamos hacia el vivac Scott.

Hacia las 15.30 de la tarde llegábamos al vivac . Primero llegaron Alex y Ferrán. Yo todavía estaba en el corredor de la ruta con Asier, ya que el vivac queda fuera del corredor a mano derecha, a medida que iba llegando escuchaba todo tipo de juramentos. Hasta que escuché lo que no quería escuchar: “el viento se ha llevado las tres tiendas”.

No me lo podía creer. Como estos algunas veces o muchas mejor dicho, me toman el pelo, no me lo creí hasta que llegué y lo vi con mis propios ojos. No había nada, nada de nada. El viento se había llevado las tres tiendas con todo, sacos, esterillas, ropa, comida, hornillos, gas, manoplas, pioles, todo, todo. El viento había arrancado todo, las tiendas estaban sujetas con cuerdas, y no estaban ni las cuerdas. Nada de nada.

En aquel momento me bloqueé, no sabía qué decir, ni qué hacer. Hacía mucho viento, todos estábamos con mucho frío, Alex gritaba, Ferrán con toda la impotencia del mundo filmaba, mientras Asier sentado mirando al infinito. lloraba.

Enseguida decidimos bajar a al campo avanzado, ya que ahí no podíamos pasar la noche, el viento era muy fuerte y comenzamos a bajar. En medio del corredor bajando es cuando el mundo se me vino encima, la impotencia, el frío, el dolor, todo hizo que me bloqueara y empecé a llorar, de impotencia. Estábamos en un sitio peligroso, debajo de unos grandes seracs, pero no podía, estos empezaron a animarme, a darme besitos, a acariciarme. Enseguida me di cuenta que había que salir de ahí, que los lloros no podían ser, y que había que bajar lo antes posible.

Llegamos de noche al campo avanzado, cansados y desmoralizados. Solo queríamos dormir. Nuestros compañeros del campo base, nos animaban, nos transmitían todo el cariño del mundo, y entre todos decidimos que al día siguiente pensaríamos qué hacer.

El día siguiente, ayer , la única solución era bajar al campo base, ya que sin material, y encima con el viento que hacia no podíamos hacer nada.

Y AHORA QUÉ? QUÉ VAMOS HACER? CÓMO NOS SENTIMOS? QUÉ ES LO QUE PASA POR NUESTRAS CABEZAS?

De momento os cuento cual es la situación; las cosas no están nada fácil, falta algo de material, el parte del tiempo nos dice que hasta el dia 20 el viento en altura sera de 60 a 80 km/h , y el permiso de escalada se nos termina el día 20. Pero de momento no hemos tirado la toalla del todo, o por lo menos no la queremos tirar. Queremos esperar hasta el día 15, por si hay un cambio tremendo del tiempo, y lo intentaríamos otra vez.

Ahora me toca contaros cómo me encuentro yo, os podéis imaginar, cada minuto me pasan diferentes cosas por la cabeza. Tengo sensación de fracaso, de haberos fallado a todos vosotros, de impotencia por no poder hacer nada. Esto debe de ser el peso de la fama, de ser conocida, no sabéis lo que motiva cuando las cosas van bien, vuestros apoyos, vuestros ánimos, vuestro calor. Pero qué difícil es mi situación ahora, cuando no os puedo dar buenas noticias, cuando una piensa que esta defraudando a los demás. algunas veces pienso que no valgo para esto, por este motivo. Quizás escalando soy muy fuerte mentalmente, pero en esto no lo soy para nada.

Pero bueno, voy hacer un esfuerzo para ser positiva, y transmitiros, que si nos dan esos días de bueno, lo intentaremos. Y que sino, continuaremos para adelante. Que habrá mas oportunidades, que el proyecto continuara y que estoy segura que entre todos terminaremos los 14 ocho miles.

Besos y abrazos llenos de cariño para todos.

 

 

<<
1
...
4
5
6
...
19
>>